¿No os parece lamentable que obispos y cardenales defiendan al crucifijo como “símbolo cultural”?

A mi sí, incluso repugnante. Y sin embargo (INCOHERENCIA):

¿Con crucifijos o sin crucifijos en las aulas?

El crucifijo es un signo de identidad cultural, un símbolo de la cultura que bebemos. ¿Por qué ocultarlo?

¿Qué define nuestra identidad?

El arte, la estética, la belleza plástica: ¿quitamos también águilas y leones por criterios animalistas o por simbolizar a evangelistas? ¿Empobrecemos nuestro entorno?

Esto dicho por un ateo me parece excelente. Dicho por un obispo de la Iglesia Católica me parece una aceptación de la apostasía.

5 comentarios

  1. «»»Esto dicho por un ateo me parece excelente. Dicho por un obispo de la Iglesia Católica me parece una aceptación de la apostasía.»»»

    Efectivamente. Has dado en el clavo querido amigo.

    Saludos!!

  2. Bueno, el tema no es fácil. De esto ya he hablado varias veces en mi blog. A ver, cuando se habla, por ejemplo, de la prohibición de los símbolos religiosos en los espacios públicos (eufemismo progre para no decir directamente «eliminar los crucifijos») no se trata el tema del hijab en las escuelas, pues los musulmanes dejan claro que el hijab no es un símbolo religioso sino cultural, cuando todos sabemos que no es así. Pero bueno, lo dicen y así pueden seguir llevándolo, porque claro, a ver quién es el «facha» y el «reaccionario» que les lleva la contraria. A los musulmanes no les importa rebajarse y negar incluso su condición de musulmán en determinadas situaciones (lo permite el Corán). No les importa mentir y decir, por ejemplo, que el hijab es un elemento cultural y no religioso porque así saben que podrán seguir llevándolo y nadie en este país de progres acomplejados les va a decir nada por ello. Para ellos, mentir está justificado si es por el bien del Islam. Y así lo hacen. Y todos lo sabemos.
    A los cristianos, en cambio, nos cuesta más mentir en estos aspectos. Renunciar a tu religión (aunque sea una renuncia falsa como solían hacer los moriscos) no está permitido bajo ningún concepto. No puedes renegar de Dios, y eso tiene sus pros y sus contras. Porque claro, el otro día escribí un artículo sobre el reciente caso del Cristo de Monteagudo y al final proponía que, al igual que hacen los musulmanes con el hijab, mintamos y digamos que el Cristo de Monteagudo no es un símbolo religioso sino cultural, y así lo salvamos de la destrucción que lo amenaza. Pero es que al final, qué le vamos a hacer, no podemos rebajarnos tanto. Los musulmanes no les cuesta nada rebajarse todo lo que haga falta con tal de conseguir sus propósitos (como ocurre con el caso del hijab), pero nosotros somos más, no sé, ¿tontos?, ¿honestos? ¿valientes?. El caso es que nosotros no nos rebajamos y llamamos a las cosas por su nombre. ¿Esto provocará que nos desguacen el Cristo de Monteagudo? No lo sé, pero si así fuera, sabríamos que hemos hecho lo correcto en todo momento, sin renunciar ni a nuestros valores ni a nuestra tradiciones ni a nuestro orgullo. Otros no podrán nunca decir lo mismo. ¿Determinados obispos y cardenales defienden que el crucifijo es un símbolo cultural? Ya os digo que es comprensible. No es ético ni valiente pero puede llegar a ser comprensible. No es ni más ni menos que luchar con las mismas armas con las que luchan otras religiones. ¿Se permitirá el hijab en las escuelas porq

  3. ue se supone que es un símbolo cultural y no religioso? Pues entonces digamos que el crucifijo es también un símbolo cultural y lo mantendremos en las paredes de las aulas. Pero claro, llevamos las de perder. Ya sabéis que la tolerancia que nuestras clases dirigentes muestran hacia determinadas religiones foráneas no tiene nada que ver con la que demuestran hacia la religión católica, que es cero. Por muy cultural que digamos que es el crucifijo, éste desaparecerá y el hijab se mantendrá. España es así, y nos acercamos cada vez más al suicidio moral e identitario al que, con estas políticas y estos políticos, estamos abocados.
    Lo dicho, afirmar que el crucifijo es un símbolo cultural y religioso puede ser una buena estrategia, pues es jugar con las mismas armas que juega el enemigo. Pero no sé si es lícito. De verdad que no lo sé. Lo único que sé es que esta estrategia a los musulmanes les funciona. Pero claro, nosotros no somos musulmanes y no solemos rebajarnos tanto. En fin, lo dicho, no sé, no sé si negar el carácter religioso del crucifijo llega a ser apostasía o no, o si estaría justificado. Personalmente creo que no es justificable bajo ningún concepto, pero qué queréis que os diga, no lo tengo claro del todo si el fin es que no nos quiten los crucifijos de nuestras escuelas.
    Por cierto, enhorabuena por el blog. Lo sigo a menudo y me gusta bastante. Con vuestro permiso os enlazo desde el mío (www.lacolumnadelcapitanamador.blogspot.com).
    Un saludo.

  4. Es un simbolo religioso y cultural tambien , supongo que los obispos lo que pretendían era lanzar un mensaje a los occidentales no creyentes que vagan perdidos y desarraigados entre tanta «multiculturalidad» alienante.

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*