Tratamos aquí de La verdadera historia de la Hanukah, que consignábamos como una celebración de triunfo del tradicionalismo judío contra el supremacismo griego; como la resistencia del localismo judío contra la helenización, contra el universalismo griego.
En un artículo publicado el pasado diciembre, el ateo Hitchens cargó las tintas (desde el supremacismo ateo), y afirma que si no hubieran triunfado los fundamentalistas, tampoco habría surgido el Cristianismo que después perseguiría a los judíos, y por tanto tampoco el Islam, que les sigue persiguiendo aun hoy en día con saña genocida.
Had it not been for this no-less imperial event, we would never have had to hear of Jesus of Nazareth or his sect—which was a plagiarism from fundamentalist Judaism—and the Jewish people would never have been accused of being deicidal «Christ killers.» Thus, to celebrate Hanukkah is to celebrate not just the triumph of tribal Jewish backwardness but also the accidental birth of Judaism’s bastard child in the shape of Christianity. You might think that masochism could do no more. Except that it always can. Without the precedents of Orthodox Judaism and Roman Christianity, on which it is based and from which it is borrowed, there would be no Islam, either. Every Jew who honors the Hanukkah holiday because it gives his child an excuse to mingle the dreidel with the Christmas tree and the sleigh (neither of these absurd symbols having the least thing to do with Palestine two millenniums past) is celebrating the making of a series of rods for his own back. And this is not just a disaster for the Jews. When the fanatics of Palestine won that victory, and when Judaism repudiated Athens for Jerusalem, the development of the whole of humanity was terribly retarded.
Hay que decir que es verdad, en parte, pero también tiene mucho de mentira. Por ejemplo el último párrafo. El cristianismo, síntesis de judaísmo y helenismo romanizado, tras fundirse con elementos germanos en la edad media llevó a la humanidad al actual grado de desarrollo. Las civilizaciones griega romana hubieran acabado como todas las antiguas; la ciencia no se tranformó en tecnología. La Edad Media, y no la Antigüedad, es la clave de la modernidad y del desarrollo tecnológico de Europa.
A Hitchkens tampoco le gusta el judaísmo:
This is childish stuff and if only for that reason should obviously not receive any public endorsement or financing. The display of the menorah at this season, however, has a precise meaning and is an explicit celebration of the original victory of bloody-minded faith over enlightenment and reason. As such it is a direct negation of the First Amendment and it is time for the secularists and the civil libertarians to find the courage to say so.
Es decir, en su caso perdona los pinos, belenes y lucecitas, pero no la Januka por ser la celebración de la victoria de “la religión sangrienta sobre la ilustración y la razón”. Hemos visto que no hay base para semejante afirmación, pero además, tampoco es que tengan los ateos un historial como para andarse llamando asesinos a los otros.
Bah, Hanukkah The holiday celebrates the triumph of tribal Jewish backwardness.
«Veíamos aquí el especial encono que Albiac guarda al catolicismo.»
Guardaba.
No me consta que Albiac siga manteniendo esa opinión.
Como yo también fui muy anticlerical años ha, entiendo que otros puedan reformarse como yo lo hice.
A mi no me consta que haya repudiado esos escritos, Guille. Y revelan una parcialidad muy poco espinosiana.
Y lo de las ablaciones de los católicos es imperdonable.