Acabo de leer/ojear el libro del Papa. Esperaba algo así como una biografía, pero es más bien una homilía sobre los evangelios. No es que lo rechace, simplemente, digo que no es lo que esperaba. En todo caso, en la introducción se indican una serie de biografías interesantes, escritas Karl Adam, Romano Guardini, Giovanni Papini, y otros.
La pretensión del Papa es cerrar la brecha abierta entre el Cristo de la fe y el histórico, enfatizada por las teologías “liberales”.
El primer capítulo trata de El Bautismo de Jesús, que no tiene sentido, ya que era un rito (no previsto en el Judaísmo) penitencial, de perdón, que no le hacía falta.
p. 34: Se presentan los distintos movimientos judíos de la época. Zelotes, los inventores del “terrorismo internacional” (dejando aparte las pretensiones universales de uno, frente a la reclusión etnicista del otro, no hay nada repulsivo ni criminal en el Islam que no esté en el Judaísmo, y si lo hay muéstreseme, por favor) que se oponen al “imperialismo romano”. Saduceos, aristocracia y sacerdotes modernistas que tratan de llevarse bien con el poder romano. Fariseos, que quieren evitar a toda costa la asimilación, y que consiguen la supervivencia del judaísmo (como judaísmo rabínico basado en el Talmud) y de los judíos como minoría separada de resto de la sociedad.
El segundo capitulo trata de Las Tentaciones de Cristo. Os dejo aquí un escrito de Terzio a respecto. Le dejé un comentario en el que expongo lo que más me llama la atención al respecto de la última tentación:
Ante la última tentación, el Cristo no desmiente a Satanás llamándole embustero, le recuerda solo la obligación de adorar a Dios ante todo. Es quiere decir que Satanás tiene poder para conceder reinos a quien le sirve.
Apañados estamos. Ante esto solo vale la esperanza y la recordación de la garantía última de Cristo.
El tercer capitulo se titula El Evangelio del Reino de Dios y trata de la diferencia entre los evangelios sinópticos en el que el mensaje más frecuente de Cristo es la llamada la preparación para el Reino de Dios y el resto del Nuevo Testamento, que se centra en la predicación sobre Cristo, una vez que este es ajusticiado, por lo que se frustra la materialización del Reino de Dios “Jesús anuncia el Reino de Dios, pero lo que aparece es la Iglesia”.
Todo depende, desde luego, de como se entienda Reino de Dios, si se considera que debería ser el restablecimiento de poder temporal de Israel, desde el Nilo hasta el Eúfrates, como algunos judíos exigen aquí y ahora, el surgimiento de la Iglesia es un cambiazo en toda regla. Se les sigue atragantando dos mil años después del suceso.
La clave está en determinar si el mensaje de Cristo cabe en el Judaísmo o es vino nuevo que no cabe en odres viejos. Es la pregunta del millón, la clave para entender las relaciones de judíos y cristianos. Desde luego, para mi, los judíos son muy inconsistentes en el tratamiento de Cristo, por una parte dicen que solo fue un predicador judío que nunca tuvo intención de crear una religión nueva. Pero entonces ¿por qué le dieron matarile? ¿Y porqué siguen rechazándole? ¿Por qué les causa tanta repulsión?
Dicen que porque los cristianos han usado su figura para perseguirlos, pero sabemos bien que eso es una razón son una excusa, y bastante mala: Entrevista del sionista Herzl con el papa San Pío X, Ejercicios de denuncia de la ceguera judeofílica. La persecución de los cristianos explica que rechacen a Cristo, aunque de hecho lo rechazaban desde antes de esa persecución. Vamos, que no se la creen ni ellos, salvo algún judeófilo poco avispado.
En resumen, el Reino de Dios es moral y universal, y no cabe en el judaísmo, aunque pueda integrarlo, porque no es antijudáico. Habamos del judaísmo de la Tora, no los desarrollos talmúdicos que tienen como propósito, precisamente, el rechazo de Cristo.
Yo no lo he leído todavia, pero supongo que como con todos los libros, habrá adeptos y contrarios, pero no deja de ser interesante.
En cuanto al párrafo de «la tentación de Cristo» y concretamente el la ultima frase que dice: «Satanás tiene poder para conceder reinos a quien le sirve» lo tenemos patente en la tierra, Pero¿ a que precio? ¿ vale la pena? muchos creen que si y venden sus almas.
Lo que esta claro es que Satanás es el príncipe del mal y siempre esta tentando al hombre, como lo intento con Jesucristo, hombre e hijo de DIOS, y no lo consiguió, y para mi Satanás sigue haciéndolo en la actualidad con millones de seres humanos ya que es su fin, y unos excelentes discípulos suyos son los moros, que además de querer desmentir toda la verdad escrita de nuestra religión, intentan acabar con todo lo que no es moro, a base de violencia y muerte.
Nuestro Dios fue benevolencia, con sus enemigos, cuando se entablo la gran batalla en los cielos Dios mando a los arcángeles y concretamente a San Miguel que cuando derrotaran a Satanás no lo mataran, que el los mandaría al fondo de los infiernos.
El fallo que hizo Dios fue ese, ya que como ser superior hubiera podido hacerle desaparecer de la faz del mundo, pero es tanta su misericordia y amor que lo dejo vivir., en parte condenándonos a convivir con sus discípulos terrenales y sus malvadas enseñanzas.
AMDG, conste que no he leído el libro y por tanto no puedo hablar de él, pero sí leo tu entrada y hay saltos en tu pensamiento que no me quedan claros. Pero como me sale otro post casi, lo pongo en dos comentarios distintos.
Lo del Cristo de la fe y el Cristo histórico creo que es un tema serio, pero viene desde el principio de los tiempos de la propia Iglesia. El “problema” de nuestro tiempo es que, al obviar el concepto de pecado, Cristo no necesita redimirnos de nada, por lo que se convierte en un “guerrillero” al más puro “estilo Ché” que quiere acabar con las injusticias y con los opresores de este mundo (me acuerdo de las canciones de la misa campesina, en concreto el kyrie, “Cristo Jesús, identifícate, no con la clase opresora que exprime y devora la comunidad, sino con el oprimido”, etc; o el credo “Yo creo en vos compañero, Cristo humano, Cristo obrero.., sin mención al Cristo Dios). Esa mentalidad ha seguido más o menos latente.
“no hay nada repulsivo ni criminal en el Islam que no esté en el Judaísmo, y si lo hay muéstreseme, por favor”. Líbreme Dios de rebatir esto, pero… :)partiendo de que el yihadismo es heredero de los zelotes, que efectivamente, con sus métodos violentos pueden considerarse precursores del terrorismo universal por motivos religioso-políticos, me salen dos cuestiones.
Si no recuerdo mal, los zelotes surgieron prácticamente contempóraneos a Cristo. No puedes decir que todo el judaísmo de siglos anteriores estuviera impregnado de “zelotismo”. Sin embargo, el yijadismo existe desde los orígenes mismos del islam. Por fuerza, eso imprime carácter.
Pero además, los zelotes eran una facción violenta y separada de los fariseos. El judaísmo no llama a todos los judíos a ser zelotes, ni los zelotes son parte intrínseca del judaísmo. Sin embargo, la yihad forma parte indispensable del islam y el corán llama a todos los musulmanes a practicarla. Lo harán o no según las circunstancias, pero están llamados todos a ella. La violencia, intrínseca en el islam para su expansión, no lo es en el judaísmo salvo como defensa ¿no?. Y eso es una gran diferencia entre ambos.
Sigo en otro comentario.
Tabus alimentarios, lapidación de adúlteras, esclavitud, poligamia, prohibición de las imagenes, circuncisión…
La diferencia es que el Islam es universalista y expansivo. El Judaísmo es tan racista que rechaza el proselitismo. Pero no la explotación del infiel.
No me convence totalmente tu respuesta, pero gracias por contestar.
Respecto a lo demás, es donde menos clara me queda tu argumentación.
Creo que no hay duda de cómo se debe entender el Reino de Dios: mi reino no es de este mundo. No creo que signifique que es para el más allá, sino que, aún realizándose en este mundo, no necesita de sus estructuras para hacerlo. Y los judíos también lo tienen claro: es usando las estructuras temporales, igual que el islam.
Por eso el salto siguiente que das también se me escapa (desde “todo depende de.. “ hasta el siguiente párrafo). ¿Depende para qué o para quién? ¿para los cristianos?¿para los judíos? Porque yo creo que tanto unos como otros lo tienen claro.
Respecto a tu “pregunta del millón”, bueno, aún sin entender por qué un libro de homilías te sugiere las relaciones judeocristianas, creo que para entender lo que debió suponer Jesús para los judíos, aunque en la Torá está la clave principal, yo al menos cuando lo he visto más claro ha sido leyendo a s.Pablo.
No es imposible que un judío acepte a Cristo -estarías negando la gracia divina, al ejemplo de s.Pablo me remito- pero es muy improbable, ya que precisamente Cristo desmorona el centro mismo de la fe judía, comenzando por la misma imagen de Dios. Supongo que en tu conclusión dices de otro modo que el Reino de Dios no cabe en el judaísmo, pero éste si cabe en el Reino de Dios por la conversión mediante la gracia divina ¿no?
Pero ¿qué tendrá que ver un libro de homilías con todo este tema? es mi gran pregunta.
Esta tengo que leerla con mayor detenimiento.
No digo que sea un libro de hiomilías, sino que tiene un tono homiliético cuando creía que era más biográfico.
Marian, tampoco a mi me queda clara tu argumentación, quizás porque esta redactada deprisa. Vamos a tener que discutirla por telefono 🙂
Primer párrafo, en efecto, los cristianos, frente a los judíos, rechazan el mesianismo secular. Grandísima diferencia. Los musulmanes no tienen el concepto mesiánico, aunque buscan imponer políticamente una sociedad islámica tradicional.
Lo que quiero decir es que el judaísmo es la resistencia organizada de la Sinagoga al mensaje de Cristo. Desde luego, la conversión de los judíos será un milagro, dicen que marcará el fin de los tiempos. Debemos rezar por ella, además porque lo consideran ofensivo.
Jajaja, quizá redacté de prisa; es un tema que me interesa, pero no creo que sea plan meterse en un debate profundo.
No te preocupes y gracias por contestar.
Bonita imagen de pantocrator ortodoxo.