El caso lo contamos en su día: París: Prohibida la distribución de sopa de cerdo en las calles, Propaganda contra la sopa de cerdo en la TV2 francesa, Francia: El Consejo de Estado prohibe la distribución de sopa con cerdo
Ahora, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos respalda la decisión del ayuntamiento de París (La CEDH contre la soupe au cochon):
«a légitimement considéré qu’un rassemblement en vue de la distribution sur la voie publique d’aliments contenant du porc, vu son message clairement discriminatoire et attentatoire aux convictions des personnes privées du secours proposé, risquait de causer des troubles à l’ordre public que seule son interdiction pouvait éviter».
Porque es un mensaje discriminatorio. En efecto, lo es, pero por los tabús alimenticios de quienes se niegan a comer cerdo.
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