En un municipio al sur de Londres. El domingo por la tarde está reservada a los hombres musulmanes. Bueno, los infieles pueden entrar si usan un bañador que tape el ombligo y llegue a la rodilla. Las musulmanas tienen también una reserva horaria similar; en su caso el bañador va del cuello a los tobillos.
Algunos nativos no se lo creen. Solo veo una soluión: Que aprendan a votar.
Se comienza siendo giliprogre y se acaba con el culo en pompa mirando a la Meca.
¿Deberían ser ellos los que se adapten a la vida occidental, no?
Ya se lavan antes de entrar a la piscina ?? Porque conociendo sus hábitos higiénicos es algo que me supera (bucear en caldillo de moro)
Vous êtes raciste, monsieur.
¿Cómo privar a los moritos de piscina reservada?
¿Es que acaso van a tener que bañarse junto a los puercos y a los monos?